lunes, 13 de febrero de 2012

”murió alguien a quien yo quería muchísimo… Murió Spinetta el mas grande de todos”

Dolor solo dolor.....



Jamás pensé en la muerte de Spinetta, mi mente no lo admitía, ni aun cuando se supo lo de su grave enfermedad, para mi Spinetta era inmortal, yo iba a morir y Spinetta seguiría tocando, dando sus conciertos maravillosos. Pero llego el día en que Spinetta dejo este mundo y yo sigo aquí….me encontró lejos de casa y de las noticias y me sentencio a llorar frente al televisor mientras mi hijo me preguntaba ¿Por qué lloras Papá? Tratando de encarar una respuesta para mi hijo vino a mi memoria cuando grabábamos Patria o Muerte en 1988 y Spinetta paso por el estudio y escucho Cabeza de Platino con todos nosotros, recordé su rostro único y su mueca cómplice. Spinetta era más que un referente, músico o ídolo, era parte mía y creo que de muchos, entre todos mis amigos músicos nunca faltaba una mención en las largas conversaciones sobre música, era un padre musical un alma protectora. Spinetta se ha ido pero no ha muerto, sigue vivo en cada rincón de nuestras vidas, en cada acorde que pongamos en nuestras guitarras. Mi hijo insistió y solo atine a decir…”murió alguien a quien yo quería muchísimo… Murió Spinetta el mas grande de todos” el me abrazo y me consoló y juntos miramos unos temas en la TV, cuando vi a mi hijo escuchando atentamente me di cuenta que Spinetta no estaba muerto, estaba mas vivo que nunca. Spinetta no ha muerto, su música menos y su recuerdo será imborrable para muchas generaciones. Claudio 10/02/2012